El presidente de Castilla-La Mancha ha confirmado que la intención del Gobierno de Castilla-La Mancha es que antes del 21 de julio, cuando se cumpliría un año del decreto que obligaba a utilizar la mascarilla, el Gobierno de Castilla-La Mancha pretende suprimir la obligación de usar esta protección en espacios abiertos y se lo va a plantear al Gobierno central y a las comunidades autónomas.
El objetivo del Ejecutivo castellanomanchego, siempre en consenso con las autoridades estatales, es que se pueda retirar el uso obligatorio de la mascarilla entre la última semana de junio y la primera de julio.
“Tenemos un proceso de vacunación que nos permite ser enormemente positivos”, ha manifestado en su discurso el mandatario castellanomanchego, que ha incidido en que “no podemos olvidar a todos los que se nos han ido en medio de un silencio, de un confinamiento que ningún español podría haber anticipado; es el peor castigo que se le puede hacer a un español, dejarlo en casa”.
Ha confesado García-Page que durante este año “a veces he tenido que combatir la sensación personal de impotencia, de que algo se nos estaba escapando, si no podríamos hacer algo más” y afirma que el objetivo “no es pensar en volver a donde estábamos, tenemos que intentar salir mejores. Hemos ganado y tenemos que fortalecernos en fraternidad”, afirma.
“Creo que hemos ganado y tenemos que fortalecernos en fraternidad”
García-Page se ha referido a José Luis Perales y a Pedro Piqueras, a los que les ha dicho que “sois unos fieles representantes de una España que ha pasado por muchísimas circunstancias y se propone pasar todas las que se pongan de por medio.
El presidente regional también ha querido adelantar que el próximo año, cuando se cumplirá el 40 aniversario de la autonomía, se va a celebrar los 365 días del año con la ayuda de sectores como la cultura y el deporte.
El presidente de Castilla-La Mancha ha vaticinado “un proceso de recuperación, incluso en los valores”, aunque también avisa de que habrá gente que se abone al pesimismo”. Sin embargo, cree que prevalecerá “la España de siempre, el país en el que no se ha frivolizado con la pandemia”.
Por último, en este discurso en el que ha reivindicado la identidad de Castilla-La Mancha y ha presumido que el único himno que tiene esta región “es el himno de España”, con el que se terminó el acto y ha asegurado que “levantaré siempre la voz para defender nuestros intereses legítimos y si se ven cuestionados, fuera de la región por personas que atacan a los demás”.