Los gobiernos de Castilla-La Mancha, Aragón y Castilla y León siguen avanzando en la solicitud al Ejecutivo central para implantar las ayudas al funcionamiento de empresas en las provincias de Cuenca, Teruel y Soria, así como sus zonas adyacentes que en el caso de nuestra región abarcaría a amplias zonas de la provincia de Guadalajara.
El vicepresidente regional, José Luis Martínez Guijarro, ha participado en un encuentro telemático, celebrado , junto a la consejera de Presidencia y Relaciones Institucionales del Gobierno de Aragón, Mayte Pérez, y el consejero de Economía de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, en el que se ha analizado la implementación de estas ayudas de funcionamiento que permitirían ahorrar costes laborales a las empresas en los mencionados territorios, toda vez que se ha estudiado el informe técnico elaborado ‘ex profeso’ sobre la aplicación de esos beneficios.
Dicho texto pone de manifiesto que las ayudas tendrán su reflejo en una reducción de la cotización empresarial por contingencias comunes en el Régimen General de la Seguridad Social, que alcanzará a todas las compañías que ejerzan una actividad económica en las zonas asistidas con independencia de su tamaño y de su forma jurídica, y que, además, incluirá todas las modalidades de contratos de trabajo o que tendrán carácter indefinido mientras la empresa mantenga la actividad y las ayudas sean compatibles con la normativa europea.
Su aplicación para la lucha contra la despoblación
El objetivo de estas ayudas de finalidad regional es la reducción de los gastos corrientes o de funcionamiento a las empresas, incluidas categorías como los costes de personal, y cuyo importe por beneficiario alcance el 20 por ciento de los costes laborales anuales en la zona en cuestión.
La concesión de estas ayudas es fruto del trabajo realizado desde hace meses por el Gobierno de Castilla-La Mancha, junto con los gobiernos de Aragón y Castilla y León, reclamando a la Comisión Europea que reconociese a Cuenca, Soria y Teruel, así como a las zonas adyacentes, el estatus de zonas poco pobladas abriendo así la posibilidad de poder equipararlas con las regiones de los países nórdicos en cuanto al establecimiento de ayudas al funcionamiento de las empresas que pueden alcanzar hasta el 20% de los costes laborales.
Así, y en menos de un año, se han obtenido resultados como el que las Nuevas Directrices de Ayudas de Finalidad Regional 2022-2027, publicadas en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) el pasado 29 de abril, conceden a las provincias de Cuenca, Soria y Teruel la declaración de zonas poco pobladas para así poder acceder a las ayudas y beneficios fiscales de las que ya disfrutan otras regiones de países nórdicos.
Ahora los esfuerzos y el trabajo se enfocan, esencialmente, en la solicitud, ya trasladada, al Gobierno de España para poder implantar estas ayudas que supondrían un atractivo añadido para las empresas que quieran instalarse en estos territorios y que, por lo tanto, redundaría en el mantenimiento y creación de empleo, siendo también una potente arma en la lucha contra la despoblación.