El Gobierno de Castilla-La Mancha ha defendido el sector vitivinícola y su producto, el vino elaborado en la región y que a día de hoy llega a más de 150 países del mundo. Es por ello que reivindica su importancia, porque “no tenemos tarjeta de presentación mejor” y hay que presumir de ello, y “venderlo de verdad”, mostrando todo “nuestro reconocimiento” por quienes “venden lo mejor de nuestra tierra”.
Así lo ha indicado el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, en la noche de ayer viernes, en el acto institucional anual organizado por el Ayuntamiento de Valdepeñas dentro del programa de septiembre, celebrado en Bodegas A7, y en el que se ha hecho entrega de sus Honores y Distinciones, contando con la escritora Ángela Vallvey como mantenedora poética.
Un año, el segundo, en el cual, por la pandemia, no se han celebrado las Fiestas del Vino como tal, pero que sí ha contado con el acto de reconocimiento en el inicio simbólico de la vendimia, en unos días en los cuales comienza a recogerse la cencibel.
Acompañado en el evento por el alcalde de la localidad Jesús Martín, y la subdelegada del Gobierno en Ciudad Real, María Ángeles Herreros, el consejero ha trasladado en su intervención, que Castilla-La Mancha es, desde hace mucho tiempo, la región del mundo que más variedades de vino ofrecen a los consumidores estén donde estén.
En la ciudad del vino, Martínez Arroyo ha recordado que es aquí donde se asienta de Denominación de Origen más antigua de Castilla-La Mancha, Valdepeñas, y la tinta cencibel es la que “nos representa”.
Así, ha dicho que se está a punto de lograr que la de Valdepeñas, sea la denominación de vino “con mayor trazabilidad y garantía para los consumidores”.
En este sentido, ha recordado que el sector agroalimentario es ya el 17 por ciento de la riqueza de Castilla-La Mancha, y “nos jugamos mucho”, no solo desde el punto de vista económico, sino desde el social y medioambiental.
De esta manera, ha recordado que Valdepeñas es lo que es porque siempre hubo cepas de cencibel ancladas a la tierra de las que “surge el vino que nos permite llegar a cualquier rincón del mundo”, por lo que ha hecho un llamamiento a presumir de lo que tenemos en la tierra.
Un acto emotivo el de anoche en el que se ha nombrado Hijo Predilecto de la Ciudad a título póstumo a Juan Ruiz Pardo. Además, se ha hecho entrega del título de Hijo Adoptivo de la Ciudad a Félix Solís; la Medalla de Oro de la Ciudad para la Gerencia de Atención Integrada de Valdepeñas; la Medalla de las Bellas Artes ‘Gregorio Prieto’ a Cristino Quintana Sánchez y la Medalla al Servicio Desinteresado de la Ciudad al Grupo de Voluntarios y Voluntarias por la realización de mascarillas para la pandemia de la Covid-19. MartínezArroyo, ha felicitado a todos ellos y ha resaltado que son los “esfuerzos colectivos” por los cuales hay que “sentirse orgullosos”.
La jornada de hoy se ha cerrado con la ofrenda del Primer Mosto a la Virgen de Consolación, patrona de Valdepeñas, a cargo de la Agrupación de Coros y Danzas ‘Fermento’.