El delegado del Gobierno de España en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca, ha defendido con contundencia que, “desde el primer momento” se está trabajando para “tratar de garantizar” el transporte de bienes esenciales y el desarrollo de servicios esenciales y que éste no se vea afectado por “un paro de un colectivo minoritario de transportistas autónomos” y, mucho menos, por “posibles actos de violencia o vandalismo que no vamos a aceptar ni a permitir”.
Así lo ha trasladado en la reunión por videoconferencia que el delegado del Gobierno ha convocado este viernes con representantes de la Patronal regional, asociaciones empresariales, organizaciones de transportistas, logística, distribuidores, agrarias, cooperativas, subdelegado del Gobierno en Toledo y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
En ella se ha expuesto que, desde el día 14, la Delegación del Gobierno, y las cinco Subdelegaciones en Castilla-La Mancha, están atendiendo de forma continua las llamadas e inquietudes de organizaciones y asociaciones, así como de empresas, que se han encontrado con problemas para poder transportar sus productos y abastecer los mercados, garantizándoles, mediante convoyes y la escolta de las Fuerzas y Cuerpos de seguridad, el desarrollo de su trabajo y la llegada de las mercancías y productos a sus destinos, evitando así desabastecimientos masivos.
A este respecto, ha concretado con datos Tierraseca, “la Guardia Civil y la Policía Nacional han realizado hasta hoy más de 250 servicios de escolta dentro de Castilla-La Mancha y con destino a otras comunidades autónomas, por lo que estamos en permanente contacto entre las Delegaciones de Gobierno, las Subdelegaciones, las Comisarías Provinciales y las Comandancias de la Guardia Civil”.
“No se trata de una huelga, sino de un paro”, ha defendido el delegado del Gobierno de España en Castilla-La Mancha, y en esta ocasión lo quiere ejercer un porcentaje minoritario de transportistas autónomos, pero ello, ha añadido, no puede perjudicar a otro derecho, “el de una mayoría de los transportistas autónomos que sí quieren trabajar”, y, por ese motivo “no vamos a aceptar son actos de violencia o vandalismo” hacia esa inmensa mayoría que quiere mantener su actividad con normalidad.
La atención policial se plantea a través de un dispositivo de refuerzo de más de 23.000 efectivos en todo el país, detallado por el Ministerio de Interior, y que en Castilla-La Mancha supone la actuación de 1.842 agentes. En concreto, está compuesto por 440 agentes de la Policía Nacional y 1.402 efectivos de la Guardia Civil.
“La Delegación del Gobierno y las Subdelegaciones recibimos las peticiones y las trasladamos a este dispositivo para que diseñe las rutas de los servicios de escolta y se garantice el transporte de los suministros hasta su destino”, ha explicado Tierraseca. “Agradezco el esfuerzo extra y el compromiso que están demostrando nuevamente las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad”, ha destacado también.
El objetivo de este dispositivo policial, ha concretado Tierraseca, es “garantizar el abastecimiento, garantizar la circulación en los polígonos industriales y perseguir los actos violentos”.
En la reunión, el delegado del Gobierno ha hecho un “llamamiento a la responsabilidad” y a evitar “declaraciones inciertas o alarmantes” y que solo contribuyen a crear intranquilidad planteando un escenario “que no refleja la realidad”.
Por último, Francisco Tierraseca ha agradecido la coordinación y colaboración que, desde el primer momento, ha habido también entre las distintas Administraciones.