La quinta jornada de la 59ª Semana de Música Religiosa de Cuenca ha concluido con la portentosa exhibición de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León dirigida por el impecable maestro mexicano Carlos Miguel Prieto con dos solistas alucinantes: el cuatrista venelozano Leo Rondón y el también venezolano Pacho Flores, considerado el mejor trompetista del mundo. Más de 450 espectadores se han congregado en el Teatro Auditorio de Cuenca para recorrer un sorprendente viaje musical transoceánico. La OSCyL, una de las mejores orquestas de nuestro país, ha iniciado su sobresaliente aventura escénica con ‘Música para cuerdas, percusión y celesta’ del húngaro Béla Bartók, cuya profundidad trascendental ha precedido al poema sinfónico ‘Alcancías’ del mexicano Silvestre Revueltas. A continuación, Flores y Rondón han irrumpido para colorear el ‘Concierto Venezolano’ del cubano Paquito D’Rivera y han puesto el broche final con la prodigiosa composición ‘Cantos y revueltas’ del propio Flores. Su virtuosismo y carácter jovial han entusiasmado al público, que le ha cantado el ‘Cumpleaños Feliz’ a Rondón e incluso ha tarareado ‘La Lambada’, popular ritmo brasileño, en unos minutos festivos de sonrisas continuas.
Fotografías Santiago Torralba