El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, anuncia en el Acto Institucional de Castilla-La Mancha que van a presentar una iniciativa legislativa para que el idioma no sea un impedimento para acceder a una plaza pública.
En el inicio de la intervención, Emiliano García-Page citó los nombres de dos calles de Puertollano, Numancia y Mariana Pineda de Puertollano, como símbolo de un inconformismo, “que es la esencia de una tierra como la nuestra, que casi siempre que ha buscado lo que quiere, lo ha recibido” y se acordó también del periodista Juan Ramón Levia, rostro visible de CMM en esta localidad, fallecido hace unos días.
El presidente de Castilla-La Mancha ha dedicado una mención especial a dos expresidentes de la comunidad que han querido estar presentes, José Bono y José María Barreda y alaba que “construyeron mucho y tuvieron muy claro el hecho de mimetizarse con el paisaje y la sociedad de esta tierra, no gobernaban para la nube ni estaban afectados por el mal de la M-30”.
“Creo que la gente tiene muy claro que hay muchas cosas que se deciden en la comunidad autónoma”, opina el presidente autonómico. Destaca entre los avances de estos 40 años la Universidad de Castilla-La Mancha y le pidió al rector, Julián Garde, que “terminen muy bien el trabajo del sistema educativo” para que los castellano-manchegos no terminen en otros sitios. Precisamente recuerda que este miércoles se firmará el acuerdo con la universidad regional, que impulsará el desarrollo económico de esa región en la que “queremos todas las industrias posibles, menos las radioactivas y las contaminantes”.
“Son 40 años de muy buenos resultados”, insiste García-Page, que señala la lucha de esta región contra la violencia machista y recuerda que en los próximos meses se crearán cinco centros, uno en cada capital de provincial, para atender a las víctimas de agresión sexual.
El presidente regional afirma que “esta comunidad autónoma se ha dedicado a lo que se tenía que dedicar: construir una vida mejor con los mimbres que nos daban” y, como balance tras cuarenta años de autonomía, destaca como gran avance que se ha “desterrado el odio social”. García-Page que se ha sabido priorizar los intereses generales y los particulares, afirmando que él mismo pondrá siempre por delante los intereses de Castilla-La Mancha a los de su partido, y que ha habido “más luces que sombras” en estas cuatro décadas.
García-Page espera que Castilla-La Mancha sea “una tierra libre de extremismos”
Para que los próximos 40 años sean fructíferos, García-Page espera que Castilla-La Mancha sea “una tierra libre de extremismos, fanatismo y populismo”, insiste en que hay cosas que no hubieran pasado sin la autonomía y aplaude la descentralización, aunque deja claro que “nación solo hay una, que es España”
El presidente regional anuncia que van a presentar una iniciativa legislativa para que el idioma no sea un impedimento para acceder a una plaza pública en otra comunidad autónoma y asegura que defenderá que el castellano se enseñe en la educación de toda España. García-Page no entiende que en algunos lugares se exija más conocer el idioma inglés que el español.
Emiliano García-Page también menciona le crecimiento de la población extranjera en Castilla-La Mancha y que hoy “es una región que ha pasado de mandar gente a la emigración a todo lo contrario”, así como otros avances sociales y económicos, sobre todo el incremento de la exportación. Subraya también que Castilla-La Mancha, es junto con Cataluña, la única comunidad que tiene AVE en todas las capitales. Recuerda Page que “hace cuarenta años, el 40% de los castellano-manchegos ni conocían el mar”.
Por otro lado, se acuerda el presidente regional de “lo mal que lo hemos pasado todos con la crisis del COVID” y de las personas que han fallecido, por lo que aplaude el crecimiento del gasto por persona en la sanidad castellano-manchega.
Concluye García-Page que hoy los castellano-manchegos “tenemos autoestima colectiva” y que es cierto que hay cosas que mejorar y hay que hacer autocrítica “para mejorar, no para destruir”. Por su parte, presume de que en Castilla-La Mancha “en estos 40 años, ningún dirigente de la comunidad autónoma ha tenido una causa o imputación por motivos de corrupción”.
Afirma García-Page que el propósito de esta región es que España vaya mejor y reforzará a un país “que no tiene que discutir lo que es” y que la autonomía debe servir como amplificador y, si deja de ser así, “habrá que cerrarla, porque lo nuestro es España”. Los acordes de himno nacional cerraron el acto en el auditorio Pedro Almodóvar de Puertollano.
