Unas 150 personas participaron este jueves por la tarde en las diferentes actividades organizadas para visibilizar la realidad que viven millones de personas refugiadas en el mundo y todo lo que aportan a nuestra sociedad, llenado la calle Carretería de participación y solidaridad en un ambiente animado.
Un mural pintado, semillas para plantar y una cadena humana fueron las actividades programadas en la céntrica calle de la capital para dar cabida a la colaboración de la ciudadanía conquense,
Se trata de una iniciativa organizada por Acem, Cáritas Diocesana y Cruz Roja Española, las tres organizaciones que trabajan con personas refugiadas en nuestra provincia.
Las tres asociaciones instalaron un stand a la altura del inicio de la calle José Luis Álvarez de Castro para explicar a las personas que pasaban por Carretería la manera en que se apoya en su acogida e integración a las personas solicitantes de asilo que llegan a nuestro país y, en este caso, en concreto, a nuestra provincia.
Accem gestiona en la provincia de Cuenca la primera acogida de los refugiados dando información, orientación y asesoramiento jurídico y derivado a recursos de alojamiento a las personas que quieran acogerse a las ayudas de protección internacional.
Cáritas, en su trabajo diario por la integración de los colectivos más vulnerables, desempeña acciones dirigidas a las personas migrantes y/o solicitantes de asilo refugio. Este trabajo diario con los refugiados se materializa desde la acogida y acompañamiento, tanto social como jurídico, en sus procesos de integración en las sociedades de acogida. Además, la entidad cuenta con un recurso residencial dirigido a este colectivo con el objetivo de trabajar un plan personalizado de integración.
Por su parte, Cruz Roja pone en marcha el programa de solicitantes de asilo en nuestra provincia en 2017, fecha desde la que la Organización Humanitaria ha atendido a un total de 184 personas refugiadas en la provincia.