Un total de 150.000 euros aportará la empresa de distribución de calor Recursos de la Biomasa, REBI, por el patrocinio del Balonmano Ciudad Encantada en esta temporada. Se trata de un acuerdo por un año e implica que el equipo se llame REBI Cuenca y luzca los colores corporativos de la compañía soriana que se ha implantado este 2022 en la capital.
Isidoro Gómez Cavero, presidente del club deportivo, y Alberto Gómez, CEO de REBI, han formalizado el acuerdo en un acto en el hotel Torremangana. El dirigente conquense reconoce haberse movido para impulsar el aterrizaje de esta compañía en la capital, con el apoyo de instituciones como la Junta y, concretamente, del vicepresidente regional, José Luis Martínez Guijarro, presente en esta firma del patrocinio.
Gómez Cavero agradece la apuesta de la red de calor “por Cuenca y su balonmano” y asegura que desde el club trabajarán para difundir los servicios de esa compañía, que quiere darse a conocer a través del principal club deportivo de la ciudad.
Alberto Gómez, CEO de Rebi, subraya los valores que transmite el balonmano, un deporte que ha jugado y que le permitió ganar su primer sueldo como árbitro.
“La energía de Cuenca para Cuenca” es el lema con el que ha desembarcado Rebi en la ciudad y Gómez considera que esta es un forma de agradecer a la ciudad “por el recibimiento que hemos tenido”. La empresa trabaja a toda máquina para empezar a distribuir calor este invierno y en agosto empezarán la instalación de calderas en las comunidades que ya han contratado sus servicios.
Da la casualidad de que el Rebi Cuenca se enfrenta en Europa a un equipo danés donde está más extendida esta distribución de energía a través de redes de calor. Gómez comenta que “en Dinamarca nos van a tener envidia, porque la red de Cuenca va a superar en muchas cosas a las de allí por cómo se combinan las energías y cosas todavía más adelantadas que lo que están haciendo”. Señala que en este país es prácticamente obligatorio a las redes existentes, que se pueden extender a lo largo de 300 y 400 kilómetros, pero la conquense incorporará métodos, como la combinación de energías y sistemas que utilizan el sol o las aguas residuales, incluso más avanzados que lo que se está haciendo en el país nórdico.
