Honores en San Julián a los Hijos Adoptivos y Predilectos de Cuenca

Emotivo acto en la Biblioteca de la Merced para reconocer a los nuevos Hijos Adoptivos y Predilectos de Cuenca: José Luis Perales, Antonio Pérez, Teresa Marín Eced, José María Yturralde y José María Izquierdo. Todos ellos han sido distinguidos estos honores, en algún caso a título póstumo, durante los últimos años, pero no han podido recibirlos públicamente por las circunstancias sanitarias hasta este Día de San Julián.

Miguel Romero ha conducido un acto en el que el concejal de Cultura, Miguel Ángel Valero, ha comentado la contribución de estas personas “que han llevado a Cuenca en su corazón, han hablado de Cuenca y son forjadores de que cada vez más de esta tierra”.

Sobre el médico José Ramón Izquierdo, fallecido en los primeros días de la pandemia del coronavirus, el edil subraya que “hizo lo que mejor sabía hacer y murió haciendo lo que su corazón le dictaba: luchar contra el Covid y ayudar a los demás”: Además, destaca que fue una personalidad activa de Cuenca, más allá del ámbito sanitario.

Sobre la profesora Teresa Marín Eced, considera Valero que “durante toda su vida cambió la idiosincrasia de nuestra ciudad y desde la cátedra y su pluma nos enseñó que hay un camino nuevo”. Destaca el concejal que representó “una lucha de la mujer que emergía en aquellos se hizo cada vez más fuerte y gracias a eso tenemos un mundo mejor”.

Respecto a Antonio Pérez, que tampoco pudo asistir a recoger en persona su medalla, indica Valero qu “decidió apuntalar ese marchamo de Cuenca como ciudad de cultura contemporánea y arte abstracto”, trasladando su residencia desde París a Cuenca, “donde encontró su familia y contribuyó, con su proyección, a que Cuenca fuera mucho más grande”.

Acerca del artista José María Yturralde, lo definió como “uno de los responsables de que tengamos Museo de Arte Abstracto en Cuenca y uno de los responsables de que hoy tengamos una proyección internacional”.

Terminó estas semblanzas con unas palabras para José Luis Perales, Hijo Adoptivo de Cuenca, del que bromeó que “es cantante porque no pudo ser arqueólogo”, en referencia a la pasión del compositor por esa actividad. Valeo incide en que el de Castejón “luchó desde una familia panadera para salir adelante y nos ha enseñado a muchos que, aunque la vida te dirija a algunos sitios donde te dicen que tienes que estar, es la pasión la que te tiene que guiar”.

A continuación tuvo lugar la entrega de medallas. La viuda de Izquierdo, Fina, dedicó unas emocionantes palabras de agradecimiento a la ciudad por la concesión de este título. Brevemente también intervinieron los familiares de Teresa Marín Eced y de Antonio Pérez, así como un Yturralde conmovido por el momento. Muy feliz también por la medalla se sintio Perales, que se definió como una cantante “que habla de las cosas que vivimos cada día” y subrayó la grandeza de sus compañeros de reconocimiento.

El acto lo ha cerrado el alcalde de Cuenca, Darío Dolz, considera que son personas que han engrandecido, cada uno desde su ámbito, a la ciudad de Cuenca. Un reconocimiento “importante para los premiados, pero también para la ciudad, porque es necesario dotar a la ciudad de referentes en los que fijarse Gracias por hacer lo que hacen y llevar la ciudad en su corazón”.

Los nuevos Hijos Adoptivos y Predilectos han firmado tras el acto en el libro de honor, en el que José Luis Perales ha dedicado su rúbrica a los juliane, como guiño a la celebración del patrón de Cuenca.

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