Unas trescientas personas han participado en la manifestación feminista del 8 de marzo en Cuenca, que ha esquivado la lluvia pero ha tenido que lidiar con otros incidentes como la presencia de un stand de Vox autorizado por el Ayuntamiento en pleno recorrido.
Las jóvenes del Colectivo Académico 13 Rosas, convocante este año de la manifestación, han encabezado la marcha atrás una pancarta con el lema ‘Conquistamos las calles, rompemos las cadenas’. “Mujer, escucha, esta es tu lucha” ha sido el cántico con el que se ha puesto en marcha la comitiva, compuesta por una nutrida representación estudiantil que portaba pancartas contra la violencia de género (“Denuncia archivada, mujer asesinada”) y en favor del feminismo inclusivo con las personas trans.
El morado era el color predominante en una manifestación en la que también había representación de las matronas conquenses, que portaban una pancarta sobre la defensa de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, y de formaciones políticas como Izquierda Unida, Podemos y el PSOE, con varios representantes institucionales y una pancarta propia.
Al final del grupo se situaba el Bloque Crítico, con una pancarta con el lema ‘Como oprimidas y opresoras, 8M para todes’. La posición ante la prostitución era luna de las principales discrepancia entre ambos grupos, ya que mientras en la cabecera de la manifestación se defendía una postura abolicionista, los críticos entonaban cánticos frente a las trabajadoras sexuales. Las diferencias no han impedido que ambas facciones desfilaran juntas por la ciudad de Cuenca.
El momento de mayor tensión de la jornada ha sido cuando la manifestación del 8 de marzo ha llegado al lugar donde se había instalado Vox, en la calle Carretería, bajo un toldo con la frase “sin miedo a nadie”, con la excusa de repartir folletos. Varios manifestantes han respondido a la provocación de la formación ultraderechista con insultos, “fascistas” el más repetido, pero la policía local ha podido controlar la situación para que no se produjera un altercado público.
Desde Vox han defendido que el puesto tenía autorización municipal y que si ha coincidido con la manifestación es porque lo pidieron por la tarde, pero no se le concedió por la celebración del Carnaval.
Superado este momento de tensión, la manifestación ha llegado a la Plaza de España justo cuando la lluvia comenzaba a hacer acto de presencia. En primer lugar ha leído el manifiesto del colectivo 13 Rosas, que ha recordado que hay que seguir luchando porque “no queremos que nos sigan acosando, comprando y matando”. Frente a ello, han defendido la educación como “motor social para el cambio”.
En su comunicado, también ha recordado las denuncias por acoso sexual que han aparecido en la facultad de Bellas Artes y han pedido que esta situación no vuelva a ocurrir.
Posteriormente, en otro lugar de la plaza, el Bloque Crítico, con su gente situada en círculo unida por lazos de lana morado, ha cerrado la jornada con canciones, y la lectura del manifiesto en la que han defendido sus posiciones ideológicas y se han acordado de las mujeres de Palestina, entre otras cuestiones.
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