La Asociación Provincial del Comercio de Cuenca destaca que las empresas del sector están asumiendo incrementos de costes como el de la luz sin repercutir a sus clientes.
En este sentido reconoce que son los propios comercios los que sacrifican sus márgenes para mantener a su clientela que también ha sufrido en gran medida esta crisis económica.
En este sentido señalan que es constatable que el incremento de cuestiones como la luz o los combustibles, que nada tienen que ver con las empresas locales, sí que afectan a sus resultados “porque son gastos fijos que tienen que asumir y que no pueden trasladar a la clientela”.
Además, recuerdan el pequeño comercio ya ha asumido, sin repercutir a sus clientes, una importante inversión en elementos de protección y equipos de protección individual como mascarillas o mamparas.
Es más, reconocen que el propio cliente está sufriendo estos mayores gastos, como ocurre con los de la vivienda y se hace un esfuerzo porque estos productos no suban y puedan seguir siendo asequibles en un momento en el que es necesario incrementar la confianza del usuario y estos incrementos de costes fijos en cada hogar o empresas, la verdad que en poco ayudan a estimular las compras.
IPC
La Asociación del Comercio pone como ejemplo de la contención de precios y márgenes cada vez más ajustados al comercio local los últimos datos del IPC que demuestran que se ha puesto en marcha una campaña de rebajas atractiva que se ha traducido en un descenso de los precios del 1%.
En concreto en productos como el vestido y calzado en este mes de julio el descenso de precios ha llegado al -13,2% haciendo rebajas para vender el stock, no trasladando unos costes que siguen subiendo.
