La delegada de la Junta en Cuenca y al delegado provincial de Economía, Empresas y Empleo, Óscar Javier Martínez, han informado de las ayudas para el inicio y mantenimiento de la actividad de las personas autónomas y del familiar colaborador afectadas por el covid-19 cuyo objeto ha sido a través de la línea 1 la concesión directa de subvenciones destinadas a impulsar y mantener el empleo por cuenta propia, compensando los gastos de inicio y mantenimiento de la actividad a los que se enfrenta toda persona emprendedora y mediante la línea 2 fomentar la inserción laboral de familiares de la persona trabajadora autónoma principal, mediante la prestación de servicios en el negocio familiar.
La cuantía de la subvención a recibir por cada persona beneficiaria, tanto en la línea 1 como en la línea 2, es de 3.600 euros, 3.000 euros más un 20 por ciento por ser zona ITI.
En la línea 1 se han resuelto favorablemente 234 solicitudes beneficiando a personas físicas establecidas como autónomas o por cuenta propia, que realicen la actividad en nombre propio mientras que en la línea 2 se han beneficiado 12 autónomos colaboradores. Por lo tanto, se han aprobado 246 por un importe total de 903.600 euros.
Por sectores de actividad destaca la hostelería con un 25% de solicitudes, seguida por el comercio y la construcción con un 20 y un 16%, respectivamente.
En cuanto a la distribución por municipios destaca la capital con casi una cuarta parte del total de solicitudes, estando el resto muy distribuido por toda la provincia, con Tarancón, Quintanar, San Clemente y Mota Del Cuervo con un 6 por ciento cada una de ellos.
Para finalizar, la delegada de la Junta se ha referido a la firma que el Gobierno regional realizó el pasado martes con las Diputaciones Provinciales para poner en marcha una nueva convocatoria del Plan de Empleo. En el caso concreto de la provincia de Cuenca serán más de 1.000 trabajadores los que se contraten con un presupuesto de 7,7 millones de euros.
Además, tal y como ha recordado María Ángeles Martínez “se trata de un plan vivo y flexible que se adapta a las necesidades de los pueblos de menos de 500 habitantes que son 183 en la provincia, es decir, más del 75 por ciento de los municipios, ya que estos ayuntamientos tendrán la posibilidad de elegir la modalidad de contratación desde un punto de vista temporal”.