El Gobierno de Castilla-La Mancha destinará 7,3 millones de euros en los próximos dos años -2022 y 2023-, a cubrir el coste de los trabajos de campo relativos a los programas de vigilancia, prevención, control y erradicación de enfermedades que afecten a los animales de la región.
De ello ha informado la consejera de Igualdad y portavoz del Ejecutivo autonómico, Blanca Fernández, quien ha explicado que el servicio de la orden de encargo aprobada incluye el diagnóstico frente a la tuberculosis tanto en ganado bovino como caprino; actuaciones en alertas sanitarias que pudieran surgir; marcado de animales u otras actuaciones que en materia de sanidad animal deban llevarse a cabo en relación con esa prevención, vigilancia, erradicación y/o control de enfermedades.
Blanca Fernández ha resaltado que “la prioridad de la Consejería Agricultura, Agua y Desarrollo Rural es la mejora de la sanidad en nuestra cabaña ganadera”, algo muy importante ya que la lucha contra las enfermedades animales en el ganado es garantía de seguridad alimentaria.
“Destaca Castilla-La Mancha en materia de seguridad alimentaria, y también España, en un contexto europeo en el que esto es lo primero que se pide para poder consumir carne. Somos uno de los grandes productores de carne, de queso y de leche de nuestro país y por ello es muy importante seguir trabajando para la erradicación de enfermedades como la tuberculosis o la brucelosis”, ha reflexionado la consejera al respecto.
Todo el territorio regional está declarado libre de brucelosis
La consejera y portavoz del Ejecutivo castellanomanchego ha dejado claro que, para la consecución de este objetivo, es fundamental la aplicación de los Programas Nacionales de Vigilancia y Erradicación de enfermedades animales y, de hecho, ha confirmado que “todo el territorio regional está declarado oficialmente libre en brucelosis, tanto bovina como ovina y caprina, y esto, sin lugar a dudas, se debe al esfuerzo del sector y a la inversión pública que se efectúa en este campo se forma continua”.
Precisamente, Blanca Fernández ha manifestado que, para desarrollar estas labores, se contará con un equipo de trabajo compuesto por 70 profesionales: un jefe de proyecto para las tareas de coordinación, dos titulados superiores con funciones de coordinación, ocho técnicos de grado superior (administrativos), seis titulados superiores que serán licenciados o con grado en Veterinaria con funciones de jefe de equipo, 50 titulados superiores, licenciados o con grado en Veterinaria con funciones de técnico de campo y tres auxiliares de campo encargados de la recogida y transporte de muestras y apoyo a los técnicos de campo.
En concreto, será mediante la orden de encargo de este servicio técnico a la empresa pública Tecnologías y Servicios Agrarios, S.A. (Tragsatec) aprobada ayer por el Consejo de Gobierno. Dicha empresa ha realizado con anterioridad diversas funciones en el ámbito de la sanidad animal en Castilla-La Mancha por lo que, como ha indicado la portavoz, “cuenta con la experiencia que garantiza la tranquilidad en la ejecución de un trabajo tan sensible e importante como este y con el conocimiento tanto del sector, como de la situación epidemilológica de la cabaña ganadera de la región”.
Esta empresa ha llevado a cabo actuaciones en el marco de los programas nacionales de erradicación de tuberculosis bovina y de brucelosis ovina-caprina; de vigilancia y control de las encelopatías espongiformes; en el plan de vigilancia frente a la legua azul y la influenza aviar o en la elaboración de planes de alerta. La realización de estos trabajos es de una gran complejidad de gestión y organización por la necesidad de utilización de equipos específicos y personal cualificado.