Más de un centenar de personas se darán cita el próximo 26 de octubre en Cuenca en la jornada “Oportunidades de solución autónoma en la negociación colectiva”, una jornada organizada por UGT para dar difusión a la actividad desplegada por los sistemas de solución autónoma de conflictos laborales, en general, y del Jurado Arbitral Laboral de Castilla-La Mancha y del SIMA-FSP (Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje), en particular.
Inauguradas por el secretario general de UGT Castilla-La Mancha, Luis Manuel Monforte; el vicesecretario general de Política Sindical de UGT, Mariano Hoya; y el director general de Autónomos, Trabajo y Economía Social del Gobierno regional, Eduardo del Valle, este foro también contará con la participación de la viceconsejera de Empleo, Diálogo Social y Bienestar Laboral de la Junta de Comunidades, Nuria Berta Chust; del presidente de la Diputación de Cuenca, Álvaro Martínez Chana; del alcalde de Cuenca, Darío Dolz; de la secretaria de Empleo y Política Sindical de UGT CLM, Isabel Carrascosa; del secretario general de UGT Cuenca, Vicente Martínez; del secretario confederal de UGT y patrono de UGT en la Fundación SIMA-FSP, Fernando Luján; del director territorial de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Castilla-La Mancha, Juan Díaz Rokiski; y del presidente de Cecam, Ángel Nicolás García, entre otros.
La jornada “Oportunidades de solución autónoma en la negociación colectiva” -que tendrá lugar en el Museo Paleontológico- se desarrollará a través de dos mesas de exposición y debate. En la primera de ellas se presentará la Guía de Desarrollo del último Acuerdo Interconfederal sobre la Solución Autónoma de Conflictos Laborales de UGT, mientras que en la segunda se mostrarán las formas de impulsar la mediación y el arbitraje en las distintas fases de la negociación colectiva por la trascendencia que tiene en la mejora de las condiciones de trabajo y de la vida de las personas.
La Fundación SIMA-FSP es la encargada de gestionar los procedimientos de mediación y arbitraje regulados en el Acuerdo sobre Solución Autónoma de Conflictos Laborales que suscriben a nivel estatal los agentes sociales. Fue creada en el año 1997 por los sindicatos UGT y CCOO y por las organizaciones empresariales CEOE y CEPYME, incorporándose en 2017 la Administración General del Estado.
Los conflictos que se derivan a estos procedimientos de solución autónoma, a la mediación y al arbitraje, han de ser colectivos, de tipo laboral y deben superar el ámbito de una comunidad autónoma, esto es, debe afectar a trabajadores y trabajadoras cuyos centros de trabajo se encuentran en más de una región.
La denominación “autónoma” proviene de que son las propias partes las que, con la ayuda de la persona mediadora, alcanzan el acuerdo que ponga fin al conflicto. De este modo de resolución pueden beneficiarse todas las partes negociadoras de convenios colectivos y acuerdos colectivos de trabajo. De hecho, la solicitud de intervención puede ser presentada, indistintamente, por empresarios y empresarias o por sus representantes o por la representación de las personas trabajadoras.
Según la última memoria del Consejo Económico y Social, en 2020 se tramitaron en los órganos autonómicos de solución autónoma más de 3.700 procedimientos, que vinculaban a cerca de tres millones de trabajadoras y trabajadores.
En Castilla-La Mancha, el número de conciliaciones y mediaciones fue de 217, con 3.680 empresas y 54.942 personas trabajadoras afectadas. El año anterior, por tomar un ejercicio sin tantos condicionantes por la pandemia, se procesó un número muy similar de procedimientos, 214, aunque para casi el doble de personas y muy superior el conjunto de empresas.
Por su parte, la actividad de la Fundación SIMA-FSP en 2020 recoge un total de 384 procedimientos de los cuales 2 fueron arbitrajes. El total de personas trabajadoras beneficiadas es de casi 2,5 millones en 36.108 empresas. En la memoria de actividades correspondiente a 2019 se llevaron a cabo 424 procedimientos para casi 5 millones de trabajadoras y trabajadores en un total de 165.318 empresas.
La agilidad en los trámites y plazos; la capacidad decisoria de las partes en el procedimiento; y el que no se presente como un sistema sustitutorio del judicial ni auxiliar del mismo son algunas de las ventajas que presenta el SIMA-FSP frente a otras vías de solución de conflictos laborales.