La Biblioteca Pública del Estado de Cuenca ha acogido la presentación de ‘Ciencia y Técnica en Castilla-La Mancha. Diccionario biográfico (nombres y hechos)’, recopilación de las personas, empresas, centros de formación y de investigación que, desde el siglo XI, han conformado la realidad actual de la ciencia y la técnica en la región. El acto ha venido de la mano de los coordinadores de la obra, Enrique Díez Barra y Alfonso González-Calero; y de los autores de dos entradas del diccionario, Jesús López Requena y Vicente Martínez Vizcaíno, así como el concejal de Hacienda, Promoción Empresarial y Empleo, y Patrimonio, Juan Manuel Martínez Melero; la directora de la Biblioteca Pública del Estado, Dolores García Hinarejos; y el vicerrector del Campus de Cuenca de la UCLM, César Sánchez Meléndez.
La obra, que recoge 317 entradas recopiladas por 87 autores, pone de manifiesto la historia real de la contribución de Castilla-La Mancha al desarrollo científico y tecnológico, en la que Cuenca tiene una notable contribución. Personas como Lorenzo Hervás y Panduro, Ángel del Campo Cerdán, Isabel Torres o Pilar Rius de la Pola, centros educativos como el IES Alfonso VIII, industrias tradicionales como los Molinos de Papel de Palomera o los centros de investigación dependientes de la UCLM son parte de la presencia de la provincia de Cuenca en el Diccionario.
La obra ha sido editada por Almud ediciones (www.editorialalmudclm.es/web) que desde hace más de 25 años contribuye al conocimiento y al desarrollo cultural de Castilla-La Mancha, añadiendo ahora esta faceta del ámbito de la ciencia y la tecnología. Astrónomos, ingenieros, químicos, físicos, matemáticos, médicos, maestros y profesores… distribuidos en el tiempo y en todo el espacio de la región muestran una realidad que venía pasando desapercibida.
El Diccionario pone de manifiesto un pasado desconocido de nuestra región al tiempo que fundamenta las posibilidades de futuro y anima a las personas implicadas, sean responsables de la administración, de la universidad o del tejido investigador, a abordar los retos inmediatos del desarrollo colectivo. La obra, gestada en las peores semanas de la pandemia, es también una reivindicación de la ciencia como solución de los problemas que afectan al género humano.