Darío Palomero, socio Grupo Mon, que cuenta con varios establecimientos hosteleros de la capital, se muestra cauteloso tras la finalización del estado de alarma. “La retirada del toque es un avance, pero falta por confirmar la hora hasta la que podrá abrir la hostelería”, recuerda. Si ponen un horario de cierre, Palomero espera que sea “más flexible de lo que ha sido hasta ahora”.
El portavoz del Grupo Mon recuerda que el ocio nocturno lleva prácticamente un año cerrado “y el gasto acumulado es un muy grande”. Todavía no han recibido ningún tipo de información de lo que van a poder hacer una vez finalice el estado de alarma, pero a día de hoy, el domingo la única norma que regulará el horario del establecimiento es la Ley de Espectáculos y Actividades Recreativas de Castilla-La Mancha y, si este sábado el Consejo de Gobierno no dice este sábado lo contrario, la discoteca Mon podría abrir sus puertas el día 9 de mayo.
La Mon, situada junto al parque del Huécar, está “preparada para abrir mañana mismo si hace falta si nos dejan”, según Palomero, pero van a tomárselo con calma lo largo de la semana que viene comenzarán a planificar su estrategia en función de los horarios y del tiempo que haga.
Los establecimientos del Grupo Mon fueron de los primeros en cerrar antes de que se decretara el primer estado de alarma en marzo de 2020, un gesto que fue muy aplaudido por la ciudadanía. “Empezaba a haber rumores y había algo de miedo, por eso lanzamos el comunicado, pero tampoco nos imaginábamos lo que vendría después”. Tras las finalización del primer confinamiento, la discoteca pudo abrir unas pocas semanas antes de que se volviera a decretar el cierre de la hostelería. Y así ha estado hasta ahora.
Palomero comparte el sentimiento que manifiestan muchos hosteleros durante estos días: “queremos soluciones, preferimos trabajar, pero si no se puede que nos den un respaldo que nos ayude, porque llevamos un año acumulando gastos, porque incluso estando cerrados tenemos que pagar muchas cosas”.
Reconoce este ocio del Grupo Mon que “no soy optimista y hasta que no lo vea, no lo creo”, porque duda mucho de que les dejen abrir al 100% pese al fin del estado de alarma. “Yo sé que la fiesta nocturna es la presa fácil, pero en el ocio nocturno hay mucha gente trabajando y no dejamos de ser hostelería”, recuerda.
En caso de que les dejen, en función de la hora de cierre que se establezca tendrán que valorar si compensa, “porque si abres y tienes pérdidas, tampoco merece la pena”. El clima y la preferencia de los clientes por los exteriores también influirá en su decisión. “En los bares del Casco Antiguo, ahora que llega buen tiempo, se puede trabajar muy bien y la gente se ha acostumbrado al ‘tardeo’”, observa Palomero.
Además de la discoteca, el Grupo Mon cuenta con el pub Altojardín, en las escaleras de San Miguel, donde están trabajando muy bien gracias a la gente de Cuenca. “Es una zona con mucho turismo, pero como la gente de fuera no ha podido venir los conquenses han respondido muy bien, sobre todo cuando sale el sol”.
Otro de los locales del grupo es La Mina, en la calle Ramón y Cajal, que también ha podido trabajar “mínimamente” gracias fundamentalmente a la terraza.
Ahora que finaliza el toque de queda, observa Palomero que “la gente tiene ganas de poder salir el fin de semana y nosotros encantados que así sea”, aunque habrá que seguir tomando precauciones para que las restricciones sean, cuanto antes, cosa del pasado.
Bien que la mina ha estado abierta de 23:00 a 6:00 con la puerta cerrada….. Incumpliendo las normas decretadas por el estado de alarma. Y siguen adquiriendo locales de ocio nocturno, no sé que perdidas tendrán….. Pero como en cuenca somos así, así seguiremos.
El de los palotes a tus palotes y si quieres ves a las autoridades a denunciarlo pero no levantes falsos testimonios Palote de los coj…