El presidente de la Asociación de Autoescuelas de Cuenca y de Castilla-La Mancha, Rafael Lozano, valora alguna de las cuestiones más recientes en el mundo de la conducción, tales como la introducción del nuevo grado superior de movilidad, así como mostrar su opinión sobre normativas de la DGT.
En referencia al nuevo grado superior de movilidad segura y sostenible ¿Crees que son un buen reemplazo de los cursos CAP para la formación de los docentes de autoescuela?
Si, existe una necesidad de profesorado enorme, la DGT ha estado impulsado la aceleración de cursos debido a la demanda existente. Este nuevo curso ha tenido una buena acogida, debido a que se han llenado todas las plazas.
¿Considera que con la implantación de este curso existan mayores salidas laborales que ahora?
Van a tener muchas salidas laborales, van a poder ser profesores de educación vial, directores de autoescuela, también podrán trabajar en los centros de recuperación de puntos, formadores de cursos de mercancías peligrosas e incluso asesores de seguridad vial para entidades públicas y privadas, los chavales de aquí van a salir muy formados.
En líneas generales ¿Cree que el nuevo carné disponible a partir de los 16 años es una forma de fomentar la movilidad, o ves en dicho permiso un riesgo, debido a la prematurez de los futuros aspirantes?
Lo veo de forma positiva, teniendo en cuenta que con dicha edad pueden llevar motocicletas mucho más potentes, que son los principales vehículos responsables de las tasas de mortalidad más elevadas en carretera, siendo el grupo de edad más afectado el que comprende entre los 30 y los 35 años. También desde las autoescuelas intentamos fomentar a los más jóvenes el peligro de darle un mal uso a los vehículos puede tener consecuencias fatales.
Si bien lleva durante mucho tiempo implantado, ¿considera que el carné por puntos ha ayudado a reducir las tasas de mortalidad en carretera
Sí, sin duda, desde la CNAE y la DGT se ha hecho una buena labor, debido a que, para la recuperación de puntos, solo hay pocos sitios autorizados para impartir dichos cursos. Por ejemplo, en Cuenca y en Tarancón solo hay un lugar de recuperación de puntos, no se ha producido esa liberalización de dichos cursos, y considero que el día que se impulse esa liberalización, el control de los cursos va a ser menor, y las posibilidades de que existan fraudes van a ser mayores. Con el sistema actual, al ser muy pocos centros los autorizados, se puede detectar fácilmente y actuar en consecuencia.
En referencia a la nueva normativa de prohibir el exceso de velocidad a la hora de adelantar ¿Diría que es una medida acertada, o la considera un error?
Es un error fundamental, los políticos no cuentan con los técnicos y especialistas. Con la normativa anterior, al poder rebasar esos 20 kilómetros extra te daba un plus de seguridad a la hora de realizar la maniobra. Con la nueva normativa, al no poder superar ese límite de velocidad, las posibilidades de que haya un siniestro son mucho mayores. Es una norma que no se adapta a los tiempos actuales, y ojalá que llegue otro gobierno y la quite.
En cuanto a las autoescuelas online ¿Opina que son un buen modelo para la formación de futuros conductores, o apuestas por la formación presencial?
Yo apuesto por la formación presencial, es la que mejor interactúa con el alumno, con la que le mejor le preparas. No veo problema en que se impartan clases online, siempre y cuando la imparta un profesor certificado, y de ser en caso contrario, se debería denunciar. Yo creo que la formación que debe regir es la presencial, que es la que garantiza un aprendizaje más dedicado, dejando la formación online como complemento de la presencial.
En relación a la ciudad de Cuenca ¿Es cierto el dicho que reza que es más sencillo obtener el permiso en comparación a otras localidades?
Pues no, es un mito, es una mentira. En Cuenca tenemos la suerte de poder aprender circulación urbana muy bien al no ser una ciudad muy grande, y también al tener una carretera convencional y una autopista podemos practicar la conducción por dichas vías, aunque existe una gran dejadez por parte de los gobiernos que han pasado por el ayuntamiento, que llevan seis legislaturas sin pintar las calles, dejando la seguridad vial de los ciudadanos de Cuenca en un segundo plano, dejando pendiente líneas, señalizaciones, marcas viales y demás elementos que son importantes para la seguridad vial.