Gran participación y mucho buen humor en el caluroso desfile de carrozas con el que las fiestas de San Julián de Cuenca echan a andar de forma definitiva.
Los pequeños de los barrios conquenses han sido los protagonistas de un desfile que ha comenzado desde la rotonda, con numeroso público en las aceras y con la batucada Sambas Colgadas, como es habitual, marcando el ritmo del recorrido a golpe de tambor.
Los niños y niñas de la ciudad y sus pedanías han participado con vestidos de abeja, cocinero, personajes de videojuego y otros imaginativos trajes que contribuyen a dar colorido al pasacalles. Junto a ellos han participado algunos de los protagonistas de las películas animadas de Pixar, que se han codeado con los seres más ilustres de este desfile de carrozas de Cuenca, los gigantes y cabezudos, protagonistas este año del cartel que ilustra las fiestas.
Un grupo de majorettes y espectáculos de circo y malabarismo ha contribuido también a la vistosidad de este desfile de carrozas de Cuenca que en el apartado musical ha contado además con la participación de la banda municipal de música de Cuenca y con el grupo de dulzaineros Tiruraina, cuya presencia este año estaba marcada por la ausencia del añorado Herminio Carrillo, uno de los grandes animadores de las fiestas populares conquenses.
El pasacalles reunió a numeroso público en todas partes del recorrido, pero especialmente en una abarrotada Carretería. Tras abrirse paso entre la multitud la comitiva alcanzó la feria, donde el alcalde de Cuenca inauguró oficialmente el recinto y los pequeños, sin necesidad de quitarse los trajes, acudieron raudos a montarse en las atracciones por primera vez en las fiestas de San Julián.